Notario del reino.

Dirán que la firma del rey significa la continuación de la institución monárquica y por tanto la salvaguarda de España. Personalmente considero esto un eufemismo, la sinrazón de agarrarse a una frágil mentira: más bien se trata de prolongar la agonía de una patria condenada.

La perla del Bósforo

A pesar de la vasta bibliografía que existe sobre la ciudad y su historia, pocos son los que conocen su pasado. Para conocerlo y comprender por qué además de todas las mezquitas podemos encontrar también, por ejemplo, la sede del Patriarca Ecuménico de la Iglesia Ortodoxa o vestigios de la antigua Roma, debemos bucear en la historia y en los orígenes de “la perla del Bósforo”.

El Concilio de Nicea (325)

La división de la Iglesia no favorecía a la política de Constantino, que había conseguido unificar el imperio bajo su solo mando tras vencer a Licinio en el 324. Por ello favoreció el concilio, si bien es cierto que la predisposición de los obispos era muy alta debido a la fama y a la expansión que cobraba el arrianismo.

Constantino I

Las narraciones pueden ser cambiantes y los detalles de los hechos que se sucedieron son variables, pero la tradición acepta por lo general que Jesús se apareció en sueños a Constantino tras la visión de una cruz en el cielo acompañada de una inscripción que rezaba en griego lo que al latín se tradujo como “In hoc signo vinces” (“Con este signo vencerás”).